Generalmente, como un ser humano promedio, me he valido de excusas para posponer nuevos proyectos o cosas que por algun motivo me apasionan.
Seis meses atrás, postergaba la lectura, la escritura, el ejercicio, los encuentros con la naturaleza y demás, teniendo como excusa la falta de tiempo entre el trabajo, la maternidad y el hogar.
Ahora, embarazada por segunda vez y en esta ocasión en casa, donde el tiempo adquiere una nueva connotación, donde los domingos ahora significan lo mismo que los lunes en términos de obligaciones, me he cargado de nuevas excusas: el aseo de la casa, los malestares del embarazo, la preparación de los alimentos, el tiempo de mí requiere mi hermosa hija, en fin, no terminaría...
Pero a lo que voy más allá de mis propias razones, es a que con tanto tiempo para pensar veo cómo nos pasa la vida y no la exprimimos, no hacemos lo que de verdad nos llena sino lo que se va presentando, muchas veces sin mayor esfuerzo que el que da comer, ver televisión, dormir, trabajar, en un sin fin mecánico aterrador.
Pues bien, en medio de ese "terror" que me ha generado la desvinculación laboral, he decidido ver las cosas de otra manera...dedicándome a reflexionar sobre lo que soy, lo que quiero ser y lo que la sociedad espera de mí, porque como mujer que soy, pareciera normal que con mi amor de madre propio de mi condición femenina pudiera superarlo todo y renunciar a todo por ese ser que crece en mi vientre y yo pienso que eso es algo que la sociedad da por sentado, pero que no analiza a fondo.
No estoy diciendo que no tenga amor de madre, lo que digo es que ese mal llamado instinto maternal no necesariamente es inherente a la condición de mujer. De serlo, no habría niños y niñas desprotegidos y abandonados en el mundo.
Somos madres, sí, pero no sólo madres...Ante todo, somos mujeres, conscientes ahora del gran potencial que tenemos para aportarle al mundo.
Dentro de lo que soy, me declaro MADRE, con mayúscula, porque es una condición maravillosa que me ha hecho sentir las dimensiones del amor que puedo albergar en mi ser.
Y soy esposa, y estas dos condiciones que elegí me convierten en una persona con un rol determinante en la construcción de un hogar, que incluye desde organizar la casa hasta procurar valores para la familia.
El patriarcalismo que subsiste me adjudica como ama de casa, con lo que me dice que nací para atender, para servir, para soportar, mientras los demás disfrutan de mis atenciones, realmente entendidas como obligaciones.
Pero yo no quiero ese título dentro de lo que soy, porque se olvida de mí...el amor implica servicio pero tambien la propia estima, así que, MADRE, esposa, miembro de una familia, pero no ama de casa
Y contrario a lo que a muchas mujeres les pasa aún, mi lista no termina aquí, porque ante todo soy una MUJER, y nací para amar, pero tambien para aprender, para ocupar lugares relevantes en la construcción de espacios que permitan que la humanidad mejore, que se piense, que se cuestione y haga cambios que le sirvan a ella misma y a la madre tierra.
Y nací para ser felíz, así que todo lo que haga debe ser coherente con la búsqueda de mi felicidad...tratando de no traicionarme, como diría un evolucionado amigo mío.
Quiero formar a mis dos seres de luz de la mejor manera, pero dedicándome plenamente a ellas y sin vivencias propias no tendría mucho que aportar.
Así que me declaro en pausa por maternidad, pero no en una vida exclusiva para la maternidad...confío en que mis hijas lo comprenderán y lo disfrutarán. Y pasado este momento único en mi vida, seguramente volveré a combinar mis roles con mis pasiones...es mi más fuerte propósito.
mucha sabiduría!! a muchas les toma años entender eso, hay una presión social fomentando la imágen de la mujer como Susanitas, el maravilloso personaje de Mafalda, lo conocés?? salirse de ese lugar, implica saber decir que no o plantearse lo que uno quiere. Cuando me salí del lugar en el imaginario propio de querer ser recordada como "la madre especial", pude hasta diferenciar mucho de eso que decís, madre es diferente de ama de casa sobre todo y ahí me generé un rol especial que nombré "ama de casa no empedernida" ...jajaja se rien mis amigos pero me encanta haber hecho ese proceso y que con valentía frente alos estereotipos lo estés planteando hoy a tu edad. Creo me costó mas tiempo...Besos
ResponderEliminarLorena, amiga. Aveces desconfío de poder decirle amiga a alguien, pero te respeto por ser compañera y maestra en mi vida. Después de nuestras charlas, para mi es un placer leerte y encontrar lo bien que has organizado tus ideas, la manera como las plasmas es señal de que confías en el poder de la palabra y sobre todo confías en tu palabra.
ResponderEliminarDate esta hermosa pausa y ¡¡VÍVELA!!, te rodea mucho amor. Siembra la semilla de la intención como lo has venido haciendo y más tarde no te arrepentirás de haber vivido esta etapa de tu vida. "El mejor momento de la vida es el ahora" (pase lo que pase.
Me encanta que hallas retomado tu blog, yo cerré los míos pero ahora tengo dominio propio. Te invito a que pases por ahí. http://bordesanadidos.co.cc/
Te quiero mucho
TOTALMENTE DE ACUERDO, nuestra propia satisfaccion personal nos hace mejor madre y mejor esposa, la vida no acaba con la maternidad, nos hace mejores, nos completa, y todo esto a su vez nos hace mejores madres.
ResponderEliminarLa familia es mas unida y el amor mas inmenso cuando cada cual tiene un rol en la vida que le satisface como persona, y eso a su vez lo hace amar mas y ser mas feliz.
La MATERNIDAD no es una profesion o un oficio, es parte innata de nuestra vida, forma parte de nosotras mismas desde que nos sentimos preparadas para dar mas amor y concientes de que seremos el soporte y la guia fundamental de nuestros pollitos, pero para nada significa dejar de vivir por ello, asi que una "pausa por maternidad" es divina y entrañable, pero es solo una pausa, no la vida entera,
disfrutalo y dejanos saber como va todo, y preparate para VIVIR, con mas sueños, mas planes, mas guerras y mucho amor, indudablemente tus princecitas aprenderan y te agradeceran que seas tu misma primero para poder ser parte de ellas. te quiero y te deseo lo mejor.
Princess me encanta tu reflexion y lejos de conocer los quehaceres de una mamá en los primeros años de vida de sus hijos, porque no me ha tocado, me llamo la atanción cuando dices que "veo cómo nos pasa la vida y no la exprimimos, no hacemos lo que de verdad nos llena sino lo que se va presentando, muchas veces sin mayor esfuerzo que el que da comer, ver televisión, dormir, trabajar, en un sin fin mecánico aterrador." y me vi descrita ahí, que susto de verdad, llevo muchisimo tiempo aplazando una cantidad de cosas que quiero hacer... y les invento cualquier cantidad de excusas ....
ResponderEliminarGracias negra, en serio que intentare aplicar mas el CARPE DIEM en mi vida
Gracias por pasar por aquí amigas...
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo contigo tucuviajera!!! yo no quiero ser una susanita!!! jejeje
Graciela, hace tanto tiempo que no te leía, y me encanta lo que dices sobre la felicidad de cada miembro de la familia...
Annita, gracias por creer en mí, ni que decir de tu potencial y talento...
Y Carito, sí, hagámosle a ver si aprendemos el truco del disfrutar cada día como si fuera el último!!!
Hola! Vine a verte porque lei hoy que estabas triste y queria dejarte un beso con cara de Rio de Janeiro, para que te haga compania y te alegre. Igual tu mensaje ya era viejo, asi que si ahora ya estas feliz, guardate el beso para otro dia en el que te vuelva la tristeza! :)
ResponderEliminarMe gusto mucho el nombre de tu hija en camino, Lucia. Como la cancion de Serrat y como mi hermana.
Coincido con lo que escribiste en esta entrada, no tengo hijos, pero independientemente de eso, creo que el papel de la mujer necesita ser reivindicado todo el tiempo en esta sociedad. Ojala que la que les toque a tus chicas sea mas igualitaria!
Besos
Siempre viene bien un beso de una amiga querida Julieta!!! Gracias por preocuparte
ResponderEliminar